DÍA 1: Cenotes Cuzamá – Cenotes Homún – Izamal
7:00 a. m.: Iniciamos muy temprano nuestro recorrido para dirigirnos al pueblo de Cuzamá, dentro del Anillo de Cenotes, ahí abordaremos un “truck” (carrito tirado por un caballo), que nos llevará por las vías que
eran utilizadas para transportar el henequén. Visitaremos tres cenotes; Chan-Ucil “mosco pequeño”, Chak-Zinik-Ché “casa de la hormiga roja” y Bolon Chojol “nueve agujeros de ratón”, donde podremos nadar, bucear y dedicarnos a la contemplación de estas maravillas de la naturaleza. La
palabra cenote (ts’ono’ot), significa en maya “cavidad con agua“.
Continuamos hacia el poblado de Homún, con más de 300 cenotes registrados hasta ahora. Ahí repetiremos la terapia de relajación en tres cenotes más; Balmil, Hool-Kozom y Bebelchén, todos de tipo cerrado. Las cuevas de los cenotes se forman lentamente por la disolución de la
roca caliza (carstificación) y la caida de sus paredes y techos.
El Anillo de Cenotes, Reserva Estatal Geohidrológica desde 2013, está alineado con la forma del cráter de un meteorito que cayó hace 65 millones de años, cerca de Chicxulub, Yucatán. Los cenotes de Cuzamá y Homún se encuentran dentro de él.
Continuamos hacia la hermosa ciudad colonial de Izamal, que ha sido declarada Pueblo Mágico y donde todo es color amarillo-felicidad. Visitaremos el Convento de San Antonio de Padua, fundado en 1549 por los franciscanos y caminaremos por las plazas y calles del centro para
llegar a la pirámide de Kinich Kak Mó "guacamaya de fuego con rostro solar" en maya, una de las más grandes de México. Por la tarde-noche regresaremos a Mérida
FIN DE NUESTROS SERVICIOS